Inmersion Reinos NTV - Flipbook - Página 49
22:10-24
J os u é
37
que les pertenecía de acuerdo con el mandato que el Señor había dado
por medio de Moisés.
Sin embargo, mientras todavía estaban en Canaán, los hombres de Rubén,
de Gad y de la media tribu de Manasés se detuvieron al llegar a un lugar
llamado Gelilot, cerca del río Jordán, para construir un altar grande e
imponente.
Entonces el resto de Israel oyó que los hombres de Rubén, de Gad y de
la media tribu de Manasés habían construido un altar en Gelilot, a orillas
de la tierra de Canaán, en el lado occidental del río Jordán. Entonces toda
la comunidad de Israel se reunió en Silo y se preparó para salir a la guerra
contra ellos. Pero antes enviaron una delegación a cargo de Finees, hijo
del sacerdote Eleazar, para hablar con la tribu de Rubén, la tribu de Gad y
la media tribu de Manasés. La delegación estaba formada por diez líderes
de Israel, cada uno pertenecía a una de las diez tribus y era cabeza de su
familia dentro de los clanes de Israel.
Cuando llegaron a la t ierra de Galaad, les dijeron a la tribu de Rubén, a
la tribu de Gad y a la media tribu de Manasés:
—Toda la comunidad del Señor exige saber por qué están traicionando
al Dios de Israel. ¿Cómo pudieron apartarse del Señor y construirse un
altar en rebeldía contra él? ¿Acaso no fue suficiente el pecado que cometimos en Peor? Hasta el día de hoy, no estamos completamente limpios
de ese pecado, incluso después de la plaga que azotó a toda la comunidad
del Señor. Y ahora ustedes le dan la espalda al Señor. Si hoy ustedes se
rebelan contra el Señor, mañana él se enojará con todos nosotros.
»Si necesitan el altar porque la t ierra de ustedes es impura, entonces
únanse a nosotros en la tierra del Señor, donde se encuentra el tabernáculo del Señor, y compartan nuestra tierra. Pero no se rebelen contra
el S eñor ni contra nosotros al construir un altar diferente del altar único
y verdadero del Señor nuestro Dios. ¿Acaso no cayó el enojo divino sobre
toda la comunidad de Israel cuando Acán, un miembro del clan de Zera,
pecó al robar las cosas que habían sido apartadas para el Señor? Él no fue
el único que murió a causa de su pecado.
Entonces la gente de Rubén, de Gad y de la media tribu de Manasés les
respondieron a esos líderes, cabezas de los clanes de Israel:
—¡El Señor, el Poderoso, es Dios! ¡El Señor, el Poderoso, es Dios! Él
conoce la verdad, ¡y que I srael también la sepa! Nosotros no construimos
el altar por traición o en rebeldía contra el Señor. Si fuera así, no nos
perdonen la vida ni un día más. Si en verdad construimos un altar para
nosotros, para apartarnos del Señor o para presentar ofrendas quemadas,
ofrendas de grano u ofrendas de paz, que el Señor mismo nos castigue.
»La verdad es que construimos este altar porque tenemos miedo de
InmersionReinos_NTV.indd 37
11/27/2017 8:25:33 AM