Inmersion Reinos NTV - Flipbook - Página 115
Samue
1S
–REYES
| 4:13–5:7
103
y, más tarde ese mismo día, llegó a Silo. Había rasgado su ropa y echado
polvo sobre su cabeza en señal de dolor. Elí esperaba junto al camino para
oír noticias de la batalla, pues estaba tan preocupado por la seguridad del
arca de Dios que le temblaba el corazón. Cuando llegó el mensajero y
contó lo que había sucedido, un clamor resonó por todo el pueblo.
«¿A qué se debe todo ese ruido?», preguntó Elí.
Entonces el mensajero c orrió a donde estaba Elí, quien tenía noventa y
ocho años de edad y ya estaba ciego, y le dijo:
—Acabo de llegar del campo de batalla; estuve allí hoy mismo.
—¿Qué pasó, hijo mío? —preguntó Elí.
—Israel fue derrotado por los filisteos —le contestó el mensajero—.
Masacraron a la gente, también mataron a sus dos hijos, Ofni y Finees, y
capturaron el arca de Dios.
Cuando el mensajero mencionó lo que había sucedido al arca de D
ios,
Elí cayó de espaldas de su asiento junto a la puerta. Se quebró la nuca y
murió, porque era viejo y demasiado gordo. Durante cuarenta años había
sido el juez de Israel.
La nuera de Elí, esposa de Finees, estaba embarazada y próxima a dar
a luz. Cuando se enteró de que habían capturado el arca de D
ios y que su
suegro y su esposo habían muerto, entró en trabajo de parto y dio a luz.
Ella murió después del parto, pero antes de que muriera las parteras trataron de animarla. «No tengas miedo —le dijeron—. ¡Tienes un varón!».
Pero ella no contestó ni les prestó atención.
Al niño le puso por nombre Icabod (que significa «¿dónde está la gloria?») porque dijo: «La gloria de Israel se ha ido». Le puso ese nombre
porque el arca de Dios había sido capturada y porque murieron su suegro
y su esposo. Y luego dijo: «La gloria se ha ido de Israel, porque el arca de
Dios ha sido capturada».
Después de que los filisteos capturaran el arca de D
ios, la llevaron del
campo de batalla en Ebenezer hasta la ciudad de Asdod. Llevaron el arca de
Dios al templo del dios Dagón y la pusieron junto a una estatua de Dagón.
Pero cuando los ciudadanos de Asdod fueron a verla a la mañana siguiente,
¡la estatua de Dagón había caído boca abajo delante del arca del Señor! Así
que levantaron a Dagón y nuevamente lo colocaron en su lugar. Pero temprano al día siguiente sucedió lo mismo: de nuevo Dagón había caído boca
abajo frente al arca del S eñor. Esta vez su cabeza y sus manos se habían
quebrado y estaban a la entrada; solo el tronco de su cuerpo quedó intacto.
Por eso, hasta el día de hoy, ni los sacerdotes de Dagón ni nadie más que
entra al templo de Dagón, en Asdod, pisan el umbral.
Entonces la mano dura del Señor hirió a la gente de Asdod y de las
aldeas cercanas con una plaga de tumores. Cuando el pueblo se dio cuenta
InmersionReinos_NTV.indd 103
11/27/2017 8:25:38 AM