Inmersion Profetas NTV - Flipbook - Página 419
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INMERSIÓN
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P R O F E TA S
En la historia de Israel, la monarquía y el templo siempre permanecían juntos. De modo que Dios envió un mensaje tranquilizador más,
por medio de Hageo, que mostraba que mantenía su promesa de una
dinastía duradera a través del rey David. Esta certeza parecía estar en
riesgo cuando Jeremías, en el punto álgido de la resistencia del pueblo
ante sus advertencias, había dicho que el rey Joaquín jamás volvería
del destierro y que «no tendrá hijos que le sucedan en el trono de
David para gobernar a Judá». Hasta Dios mismo había dicho a Joaquín:
«Aunque fueras el anillo con mi sello oficial en mi mano derecha, te
arrancaría». Pero ahora, Dios le dice a Zorobabel, el nieto de Joaquín:
«Te haré como el anillo con mi sello oficial [...] porque te he escogido».
Dios no ha olvidado su pacto, y la prometida restauración de un rey
davídico ciertamente vendrá.
Hageo es un profeta para el presente y para el futuro. El pueblo debe
reconstruir ahora la casa de Dios. Pero el libro termina con la visión de
un tiempo en que Dios está «a punto de hacer temblar los cielos y la
tierra» y derrocar a todos los que se oponen a su mandato.