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INMERSIÓN
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P R O F E TA S
13:1-17
rehúse obedecerme será arrancada de raíz y destruida. ¡Yo, el Señor, he
hablado!».
Esto me dijo el Señor: «Ve y cómprate un calzoncillo de lino y póntelo,
pero no lo laves». Así que compré el calzoncillo como me indicó el Señor
y me lo puse.
Luego el Señor me dio otro mensaje: «Toma el calzoncillo que tienes
puesto y vete al río Éufrates. Allí escóndelo en un agujero entre las rocas».
Así que fui y lo escondí junto al Éufrates como el Señor me había indicado.
Mucho tiempo después, el Señor me dijo: «Regresa al Éufrates y toma
el calzoncillo que te dije que escondieras». Así que fui al Éufrates y lo
saqué del agujero donde lo había escondido, pero ahora estaba podrido y
deshecho. El calzoncillo ya no servía para nada.
Entonces recibí este mensaje del Señor: «Así dice el Señor: esto
muestra cómo pudriré el orgullo de Judá y Jerusalén. Esta gente malvada se
niega a escucharme. Tercamente siguen sus propios deseos y rinden culto
a otros dioses. Por lo tanto, se volverán como este calzoncillo, ¡no servirán
para nada! Tal como el calzoncillo se adhiere a la cintura del hombre, así
he creado a Judá y a Israel para que se aferren a mí, dice el Señor. Iban a
ser mi pueblo, mi orgullo, mi gloria: un honor para mi nombre, pero no
quisieron escucharme.
»Así que diles: “Esto dice el Señor, Dios de Israel: ‘Que todas sus
jarras sean llenas de vino’”. Ellos te contestarán: “¡Por supuesto, las jarras
se hacen para llenarlas de vino!”.
»Luego diles: “No, esto es lo que quiere dar a entender el Señor: ‘A
todos los habitantes de esta tierra los llenaré de borrachera, desde el rey
que se sienta en el trono de David, pasando por los sacerdotes y los profetas, hasta la gente común de Jerusalén. Los estrellaré el uno contra el otro,
aun los padres contra los hijos, dice el Señor. No permitiré que mi lástima
ni mi misericordia ni mi compasión me impidan destruirlos’”».
¡Escuchen y presten atención!
No sean arrogantes, porque el Señor ha hablado.
Den gloria al Señor su Dios
antes de que sea demasiado tarde.
Reconózcanlo antes de que él traiga oscuridad sobre ustedes,
la cual hace que tropiecen y caigan en las montañas sombrías.
Pues entonces, cuando busquen luz,
solo encontrarán terrible oscuridad y tinieblas.
Y si todavía se rehúsan a escuchar,
lloraré a solas a causa de su orgullo.
