Inmersion Poetas - Flipbook - Page 308
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Job
Deberían avergonzarse de tratarme tan mal.
Aunque yo hubiera pecado,
eso es asunto mío y no de ustedes.
Creen que son mejores que yo
al usar mi humillación como prueba de mi pecado;
pero es Dios quien me hizo daño
cuando me atrapó en su red.
»Yo clamo: “¡Socorro!” pero nadie me responde;
protesto, pero no hay justicia.
Dios ha cerrado mi camino para que no pueda moverme;
hundió mi senda en oscuridad.
Me ha despojado del honor
y ha quitado la corona de mi cabeza.
Por todos lados me ha destruido, y estoy acabado.
Arrancó de raíz mi esperanza como un árbol caído.
Su furia arde contra mí;
me considera un enemigo.
Sus tropas avanzan
y construyen caminos para atacarme;
acampan alrededor de mi carpa.
»Mis familiares se mantienen lejos,
y mis amigos se han puesto en mi contra.
Mi familia se ha ido
y mis amigos íntimos se olvidaron de mí.
Mis sirvientes y mis criadas me consideran un extraño;
para ellos soy como un extranjero.
Cuando llamo a mi sirviente, no viene,
¡tengo que rogarle!
Mi aliento le da asco a mi esposa;
mi propia familia me rechaza.
Hasta los niños me menosprecian;
cuando me levanto para hablar, me vuelven la espalda.
Mis amigos íntimos me detestan;
los que yo amaba se han puesto en mi contra.
Quedé reducido a piel y huesos
y he escapado de la muerte por un pelo.
»Tengan misericordia de mí, amigos míos, tengan misericordia;
porque la mano de Dios me ha golpeado.
¿Me perseguirán ustedes también como lo hace Dios?
¿No me han despellejado ya bastante?
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