Inmersion Poetas - Flipbook - Page 164
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S almos
pero arrojó al mar Rojo al faraón y a su ejército.
Su fiel amor perdura para siempre.
Den gracias al que guió a su pueblo por el desierto.
Su fiel amor perdura para siempre.
Den gracias al que hirió de muerte a reyes poderosos.
Su fiel amor perdura para siempre.
Mató a reyes poderosos:
Su fiel amor perdura para siempre.
a Sehón, rey de los amorreos,
Su fiel amor perdura para siempre.
y a Og, rey de Basán.
Su fiel amor perdura para siempre.
Dios entregó las tierras de estos reyes como herencia:
Su fiel amor perdura para siempre.
como preciada posesión a su siervo Israel.
Su fiel amor perdura para siempre.
Él se acordó de nosotros en nuestras debilidades.
Su fiel amor perdura para siempre.
Nos salvó de nuestros enemigos.
Su fiel amor perdura para siempre.
Él provee alimento a todo ser viviente.
Su fiel amor perdura para siempre.
Den gracias al Dios del cielo.
Su fiel amor perdura para siempre.
SALMO 137
Junto a los ríos de Babilonia, nos sentamos y lloramos
al pensar en Jerusalén.
Guardamos las arpas,
las colgamos en las ramas de los álamos.
Pues nuestros captores nos exigían que cantáramos;
los que nos atormentaban insistían en un himno de alegría:
«¡Cántennos una de esas canciones acerca de Jerusalén!».
¿Pero cómo podemos entonar las canciones del Señor
mientras estamos en una tierra pagana?
Si me olvido de ti, oh Jerusalén,
que mi mano derecha se olvide de cómo tocar el arpa.
Que la lengua se me pegue al paladar
si dejo de recordarte,
si no hago de Jerusalén mi mayor alegría.
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