Inmersion Poetas - Flipbook - Page 115
102
INMERSIÓN
•
P O E TA S
Sus fieles promesas son tu armadura y tu protección.
No tengas miedo de los terrores de la noche
ni de la flecha que se lanza en el día.
No temas a la enfermedad que acecha en la oscuridad,
ni a la catástrofe que estalla al mediodía.
Aunque caigan mil a tu lado,
aunque mueran diez mil a tu alrededor,
esos males no te tocarán.
Simplemente abre tus ojos
y mira cómo los perversos reciben su merecido.
Si haces al Señor tu refugio
y al Altísimo tu resguardo,
ningún mal te conquistará;
ninguna plaga se acercará a tu hogar.
Pues él ordenará a sus ángeles
que te protejan por donde vayas.
Te sostendrán con sus manos
para que ni siquiera te lastimes el pie con una piedra.
Pisotearás leones y cobras;
¡aplastarás feroces leones y serpientes bajo tus pies!
El Señor dice: «Rescataré a los que me aman;
protegeré a los que confían en mi nombre.
Cuando me llamen, yo les responderé;
estaré con ellos en medio de las dificultades.
Los rescataré y los honraré.
Los recompensaré con una larga vida
y les daré mi salvación».
SALMO 92
Salmo. Cántico para entonar el día de descanso.
Es bueno dar gracias al Señor,
cantar alabanzas al Altísimo.
Es bueno proclamar por la mañana tu amor inagotable
y por la noche tu fidelidad,
al son de un instrumento de diez cuerdas, un arpa
y la melodía de la lira.
Todo lo que has hecho por mí, Señor, ¡me emociona!
Canto de alegría por todo lo que has hecho.
¡Oh Señor, qué grandes son tus obras!
91:5–92:5