Inmersion Poetas - Flipbook - Page 110
S almos
97
Soy olvidado,
estoy separado de tu cuidado.
Me arrojaste a la fosa más honda,
a las profundidades más oscuras.
Tu ira me oprime;
con una ola tras otra me has cercado.
Interludio
88:6–89:3
Alejaste a mis amigos
al hacerme repulsivo para ellos.
Estoy atrapado y no hay forma de escapar.
Los ojos se me cegaron de tantas lágrimas.
Cada día suplico tu ayuda, oh Señor;
levanto a ti mis manos para pedir misericordia.
¿Acaso tus obras maravillosas sirven de algo a los muertos?
¿Se levantan ellos y te alaban?
Interludio
¿Pueden anunciar tu amor inagotable los que están en la tumba?
¿Pueden proclamar tu fidelidad en el lugar de destrucción?
¿Puede la oscuridad hablar de tus obras maravillosas?
¿Puede alguien en la tierra del olvido contar de tu justicia?
Oh Señor, a ti clamo;
seguiré rogando día tras día.
Oh Señor, ¿por qué me rechazas?
¿Por qué escondes tu rostro de mí?
Desde mi juventud, estoy enfermo y al borde de la muerte.
Me encuentro indefenso y desesperado ante tus terrores.
Tu ira feroz me ha abrumado;
tus terrores me paralizaron.
Todo el día se arremolinan como las aguas de una inundación
y me han cercado por completo.
Me has quitado a mis compañeros y a mis seres queridos;
la oscuridad es mi mejor amiga.
SALMO 89
Salmo de Etán el ezraíta.
¡Siempre cantaré acerca del amor inagotable del Señor!
Jóvenes y ancianos oirán de tu fidelidad.
Tu amor inagotable durará para siempre;
tu fidelidad es tan perdurable como los cielos.
Dijo el Señor: «Hice un pacto con David, mi siervo escogido.
Le hice este juramento: