Inmersion Profetas NTV - Flipbook - Página 41
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INMERSIÓN
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P R O F E TA S
6:1–7:2
«Vengan, volvámonos al Señor.
Él nos despedazó,
pero ahora nos sanará.
Nos hirió,
pero ahora vendará nuestras heridas.
Dentro de poco tiempo él nos restaurará,
para que podamos vivir en su presencia.
¡Oh, si conociéramos al Señor!
Esforcémonos por conocerlo.
Él nos responderá, tan cierto como viene el amanecer
o llegan las lluvias a comienzos de la primavera».
«Oh Israel y Judá,
¿qué debo hacer con ustedes? —pregunta el Señor—.
Pues su amor se desvanece como la niebla de la mañana
y desaparece como el rocío a la luz del sol.
Envié mis profetas para destrozarlos,
para aniquilarlos con mis palabras,
con juicios tan inevitables como la luz.
Quiero que demuestren amor,
no que ofrezcan sacrificios.
Más que ofrendas quemadas,
quiero que me conozcan.
»Pero igual que Adán, ustedes rompieron mi pacto
y traicionaron mi confianza.
Galaad es una ciudad de pecadores,
marcada con huellas de sangre.
Los sacerdotes forman bandas de asaltantes
que esperan para emboscar a sus víctimas.
Asesinan a los viajeros en el camino a Siquem
y cometen toda clase de pecados.
Sí, he visto cosas horribles en Efraín e Israel:
¡Mi pueblo se ha contaminado por prostituirse con otros dioses!
»Oh Judá, también a ti te espera una cosecha de castigo,
a pesar de que yo deseaba restaurar el bienestar de mi pueblo.
»Yo quiero sanar a Israel, pero sus pecados son demasiado grandes.
Samaria está llena de mentirosos.
¡Hay ladrones adentro
y bandidos afuera!
La gente no se da cuenta
de que los estoy mirando.