Inmersion Profetas NTV - Flipbook - Página 352
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E ze q uiel
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»Esto dice el Señor Soberano: “Estoy en contra de sus amuletos mágicos, esos que se usan para atrapar a mi pueblo como a pájaros. Yo se los
arrancaré de los brazos y liberaré a mi pueblo como se libera a un pájaro de
la jaula. Les quitaré los velos mágicos y rescataré a mi pueblo de las garras
de ustedes. Ellos ya no serán más sus víctimas. Entonces ustedes sabrán
que yo soy el Señor. Con sus mentiras desalentaron a los justos, pero yo
no quería que estuvieran tristes; ustedes alentaron a los perversos al prometerles vida, aunque ellos continuaran pecando. Por todo eso, ustedes
ya no hablarán de visiones que jamás vieron ni harán más predicciones.
Pues yo rescataré a mi pueblo de sus garras. Entonces ustedes sabrán que
yo soy el Señor”».
Después me visitaron algunos de los líderes de Israel y, mientras estaban
sentados conmigo, recibí este mensaje del Señor: «Hijo de hombre, estos
líderes han levantado ídolos en su corazón. Se han entregado a cosas que
los harán caer en pecado. ¿Por qué habría de escuchar sus peticiones?
Diles: “Esto dice el Señor Soberano: ‘Los israelitas han levantado ídolos
en su corazón y han caído en pecado y después corren a consultar a un
profeta. Así que yo, el Señor, les daré la clase de respuesta que merece su
gran idolatría, a fin de conquistar la mente y el corazón de mi pueblo que
me ha abandonado para rendir culto a sus ídolos detestables’”.
»Por lo tanto, diles a los israelitas: “Esto dice el Señor Soberano:
‘Arrepiéntanse y abandonen sus ídolos, y dejen de cometer ya sus pecados detestables. Yo, el Señor, les responderé a todos —sean israelitas o
extranjeros— los que me rechazan y levantan ídolos en su corazón y así
caen en pecado, y después van a consultar a un profeta en busca de mi
consejo. Me pondré en contra de esas personas y haré de ellas un ejemplo
espantoso cuando las elimine de mi pueblo. Entonces ustedes sabrán que
yo soy el Señor.
»”’Además, si un profeta es engañado para que dé un mensaje, es porque
yo, el Señor, engañé a ese profeta. Alzaré mi puño contra esos profetas
y los eliminaré de la comunidad de Israel. Tanto los falsos profetas como
quienes los consultan serán castigados por sus pecados. De este modo, los
israelitas aprenderán a no alejarse de mí y por tanto a no contaminarse con
el pecado. Ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios. ¡Yo, el Señor Soberano,
he hablado!’”».
Luego recibí este mensaje del Señor: «Hijo de hombre, supongamos que
los habitantes de un país pecaran contra mí y yo alzara mi puño para aplastarlos al cortarles la provisión de alimento y al hacerles pasar un hambre