Inmersion Profetas NTV - Flipbook - Página 182
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I sa í as
¡Salgan por las puertas!
¡Preparen la carretera para el regreso de mi pueblo!
Emparejen el camino, saquen las rocas
y levanten una bandera para que la vean todas las naciones.
El Señor ha enviado el siguiente mensaje a cada país:
«Díganle al pueblo de Israel:
“Miren, ya viene su Salvador.
Vean, él trae consigo su recompensa”».
Serán llamados «El pueblo santo»
y «El pueblo redimido por el Señor».
Y Jerusalén será conocida como «El lugar deseable»
y «La ciudad ya no abandonada».
¿Quién es este que viene desde Edom,
desde la ciudad de Bosra,
con sus ropas teñidas de rojo?
¿Quién es este que lleva vestiduras reales
y marcha en su gran fuerza?
«¡Soy yo, el Señor, proclamando su salvación!
¡Soy yo, el Señor, quien tiene el poder para salvar!».
¿Por qué están tan rojas tus ropas,
como si hubieras estado pisando uvas?
«Estuve pisando el lagar yo solo;
no había nadie allí para ayudarme.
En mi enojo, he pisado a mis enemigos
como si fueran uvas.
En mi furia he pisado a mis adversarios;
su sangre me ha manchado la ropa.
Ha llegado la hora de cobrar venganza por mi pueblo,
de rescatar a mi pueblo de sus opresores.
Estaba asombrado al ver que nadie intervenía
para ayudar a los oprimidos.
Así que yo mismo me interpuse para salvarlos con mi brazo fuerte,
y mi ira me sostuvo.
Aplasté a las naciones en mi enojo,
las hice tambalear y caer al suelo,
y derramé su sangre sobre la tierra».
Hablaré del amor inagotable del Señor;
alabaré al Señor por todo lo que ha hecho.
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