Bienvenido-al-Darien-Chocoano - Revista - Página 30
NUESTRA GENTE
Pescaba Santiago Blanco, Débora Villeros mi hermana, y Margarita Villeros tambien
mi hermana éramos la misma familia. En ese tiempo no se pescaba embarcado, en la
orilla del mar pescábamos en la playa, había mucho pescado antes. Yo desde que
empecé a trabajar fue de mi cuenta, nunca tuve jefa, así que yo recogía agua vendía
agua y mi plata de una vez, que lavaba ropa de una vez la platica enseguida, y
tambien me buscaban para matar gallina, para hacer sancocho yo las arreglaba
ayudaba en la cocina me daban la comida y me daban una platica tambien, jefa así
no tuve, hasta ahora grande fue que tuve un patrón llamarse Humberto Patacón, el
primer restaurante en la playa que fue patacón pisao. Y hoy gracias a Dios aquí
tenemos un restaurantico “Papel” y de mi cuenta.
La comida llegaba en una Canoa llamarse la Gregoria de Cartagena, de Turbo no
venia nada y unos barquitos pequeños tambien traían comida.
Cuando llego el primer avión a Capurganá estábamos en la escuelita con la
profesora Gliselia Marimon tenia yo 13 años, aterrizó en el aeropuerto, nosotros
íbamos todas las tardes, nosotras con escoba y los niños con un machete a limpiar los
tronquitos porque el sacerdote Alcides Fernández, quien vino una vez en lancha y dijo
que teníamos que limpiar y la profesora nos llevaba para limpiar la carretera por
donde tirarse, porque el quería que el avión de él cayera en Capurganá y lo
logramos, cayo el avión y después para salir el avión ya no podía porque tuvieron que
mochar unas palmas de adelante, para poder salir, se cortaron y voló el avión y siguió
viniendo.
Cuando llegaba una gente así, nosotros decíamos llego una gente blanca, son gente
que no habla como nosotros, esos hablan de otra manera,y había una señora Narciza
Navas que ella sí hablaba su parla de ellos y ella se entendía con ellos, y ella nos
explico que eran turistas, que venían de otros países, y ella era la única que
hospedaba turismo, nadie más, y ella iba donde mi mamá para que yo fuera le
arreglara la gallina o el pescado. Y ya, así fue que vino viniendo turismo y turismo del
lado de Panamá y de Cartagena.
Nosotros en Capurganá vivíamos de la agricultura, íbamos al monte hombre y mujeres
íbamos a sembrar la yuca, una matica de plátano, arroz nos metíamos a cortar arroz,
a mi me crio un padrastro llamarse Fernando Seca, el me crio. Yo me levanté en la
comida, Yo tuve un padrastro que ese sí le gustaba sembrar. hoy lo que falta es mano
de hombres que siembren.
37/